Canción rota Siempre que iba a cantar algo se interponía y a mí no me importaba, ¡había tanto tiempo! Mi canción se quedaba en el alero, confiada, meciéndose en la espera cuajada de horizontes. Si alguna vez con mudo gesto antiguo acaricio las cuerdas, el aire se retira y el corazón me late nuevamente con aquellos latidos turbulentos, heraldos de mi canto. ¡Ay, mi canción truncada! Yo nunca tenía prisa y la dejaba siempre, amor, para después. Carmen Martín Gaite.
sábado, 19 de agosto de 2023
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